El mundo está bien entrado en la Cuarta Revolución Industrial y, sin embargo, los sistemas educativos no han seguido el ritmo. Los jóvenes a menudo no están aprendiendo las habilidades que necesitan para tener éxito en el siglo XXI e interactuar con su mundo cambiante, como la alfabetización digital. En el continente africano, donde el 60% de la población tiene menos de 25 años, la enseñanza de estas competencias será necesaria para que África se transforme en un continente de crecimiento y oportunidades. Si los jóvenes no aprenden a usar y crear con la tecnología, seguramente se quedarán más atrás.
¿Cómo puede África aprovechar el poder de la tecnología cuando sólo el 24% de los africanos tiene acceso a Internet?
Este porcentaje hace referencia a usuarios de Internet, mayoritariamente hombres, con cierto poder adquisitivo y cierta educación, lo que significa que se debe hacer algo para garantizar que todos los jóvenes, sin importar su género o estatus socioeconómico, desarrollen habilidades que les permitan tener éxito en el futuro.
La educación en informática ayuda a los estudiantes a comprender cómo funcionan las computadoras, usar algoritmos y resolver problemas complejos. Dado que las computadoras están a nuestro alrededor y los avances tecnológicos están revolucionando todas las industrias, saber cómo usarlas será beneficioso para cualquiera.
La expansión de la educación informática a la educación primaria y secundaria formal es básica y puede garantizar que muchos más jóvenes aprendan y tengan acceso a los conceptos de la informática.
La falta de medios e infraestructuras es el principal problema de la educación secundaria en África, más aún en los entornos rurales. Existe una brecha entre África y el resto del mundo en la educación secundaria porque sólo unos pocos jóvenes africanos tienen la oportunidad de sentarse frente a una computadora.
Por todo ello, KELLESENSA ha acondicionado y equipado con 34 computadoras un aula del Liceo de Kelle (Senegal) – educación secundaria -. Con este proyecto, queremos que los 800 alumnos del Liceo puedan tener acceso, una introducción, a la informática básica.
Queremos que este proyecto sirva de motivación para estos jóvenes sin recursos que viven en un entorno rural.